Isaías Lafuente elige 'exorcismo' como la palabra del día de este viernes 31 de enero.
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00:00Pues mirad, la palabra exorcismo tiene una etimología, según la cual, en ese orcismo
00:11andaría la palabra orco, o sea, un ser maligno, así que nombraría literalmente al acto de
00:16sacar ese ser maligno que el poseso tiene como cupa. Pero la etimología seria, sin
00:22embargo, nos lleva hasta la Antigua Grecia, en donde la palabra madre, exorquimos, hacía
00:27referencia a un juramento, y en este caso se aplicaría a ese conjuro que se hace para
00:32sacar al demonio del cuerpo. La familia dio después el verbo exorcizar y el sustantivo
00:37exorcista, para quien los practica, todas ellas han estado desde siempre en nuestro
00:42diccionario. El verbo exorcizar, por si parece complicada la pronunciación, tiene un par
00:47de sinónimos, que es desendemoniar y desendiablar, según nos refiramos al demonio o al diablo.
00:53Y como pronunciar estas dos palabras, que se referían al maligno, debía de dar yuyú
00:58en la España católica, nuestros antepasados fueron creando un ramillete de sinónimos
01:03eufemísticos para no nombrar la bicha. Y así tenemos, atención, demonche, demontre,
01:10dianche, diaño, mengue y diantre, o sea que cuando decimos diantres, estamos diciendo
01:16demonios. Bueno, tanto demonio como diablo también nos llegaron de Grecia, diablo, diábolos,
01:22allí era propiamente un calumniador. Y claro, con el pandemonio que nos rodea, lleno de
01:28agitadores calumniadores, quizás los exorcistas del Vaticano deberían reconvertirse o pluriemplearse,
01:34porque aquí no les faltaría trabajo.