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00:00Una revolucionaria prueba molecular rápida y un respirador artificial de bajo coste son
00:05las primeras soluciones innovadoras de la ciencia e ingeniería en Perú para hacer
00:10frente a la COVID-19, que con más de 264.000 contagios acumulados hace del país el sexto
00:17del mundo con más casos confirmados. Estas creaciones son las primeras en cristalizar
00:22de varios proyectos que han surgido desde las universidades peruanas, con financiación
00:26pública y especialmente privada, que ha dado fondos en cantidades sin precedentes.
00:32Así ha surgido Masi, un ventilador mecánico básico diseñado y fabricado en tiempo récord
00:38por un grupo de ingenieros de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Cada unidad
00:43cuesta unos 5.000 dólares, muy por debajo del precio que el gobierno peruano pagó recientemente
00:49por un lote de 400 comprados a China o de los 125 que la patronal peruana llamada Confederación
00:56Nacional de Instituciones Empresariales Privadas adquirió también en China para la sanidad
01:01pública. Ya están listos para comenzar la próxima semana a producir 200 unidades que
01:07servirán para paliar el déficit de estos equipos en el país, pues el gobierno está
01:11en una desesperada carrera contra reloj por aumentar su oferta de unidades de cuidados
01:16intensivos. En febrero, al inicio de la crisis, en todo
01:20Perú había solo 276 respiradores operativos para pacientes de COVID-19. Masi cuenta con
01:27los tres modos básicos de ventilación artificial para un paciente en estado grave que sufre
01:32insuficiencia respiratoria y cuyo asidero a la vida es este tipo de aparatos. El respirador
01:38manual es presionado por un mecanismo al ritmo y fuerza que le marca un software, el mismo
01:43que es controlado desde una pantalla para determinar el volumen y presión de aire en
01:48función de las condiciones de cada paciente.