Ozempic, el medicamento para la diabetes que también se utiliza para perder peso, tiene peligrosos efectos secundarios.
Así lo afirma la Asociación Americana de Psiquiatría (APA).
Según los informes, la semaglutida, el principal ingrediente del Ozempic, puede provocar cambios graves en el comportamiento.
Una mujer de 42 años con obesidad mórbida tomó Ozempic durante tres semanas y supuestamente empezó a tener delirios.
Al parecer, creyó que estaba muerta e intentó asfixiarse.
Según el Dr. Shayan Syed, de Nueva Jersey, las personas con trastornos psiquiátricos preexistentes son más propensas a sufrir estos efectos secundarios.
La mujer, de 42 años, tenía antecedentes de TEPT y trastorno bipolar, y el fármaco aumentó sus niveles de ansiedad, provocando estos delirios.
Sin embargo, algunos pacientes sin trastornos psiquiátricos previos también han experimentado efectos secundarios peligrosos.
Otro paciente, de 72 años, que se describía como una persona de alto funcionamiento, empezó a tener episodios maníacos tras un tratamiento de seis semanas con el fármaco.
Al parecer, limpiaba su casa compulsivamente y estaba convencido de que todos sus vecinos estaban muertos.
Los médicos aún no saben por qué la semaglutida provoca cambios de comportamiento, pero sospechan que en el futuro se notificarán más casos.
Así lo afirma la Asociación Americana de Psiquiatría (APA).
Según los informes, la semaglutida, el principal ingrediente del Ozempic, puede provocar cambios graves en el comportamiento.
Una mujer de 42 años con obesidad mórbida tomó Ozempic durante tres semanas y supuestamente empezó a tener delirios.
Al parecer, creyó que estaba muerta e intentó asfixiarse.
Según el Dr. Shayan Syed, de Nueva Jersey, las personas con trastornos psiquiátricos preexistentes son más propensas a sufrir estos efectos secundarios.
La mujer, de 42 años, tenía antecedentes de TEPT y trastorno bipolar, y el fármaco aumentó sus niveles de ansiedad, provocando estos delirios.
Sin embargo, algunos pacientes sin trastornos psiquiátricos previos también han experimentado efectos secundarios peligrosos.
Otro paciente, de 72 años, que se describía como una persona de alto funcionamiento, empezó a tener episodios maníacos tras un tratamiento de seis semanas con el fármaco.
Al parecer, limpiaba su casa compulsivamente y estaba convencido de que todos sus vecinos estaban muertos.
Los médicos aún no saben por qué la semaglutida provoca cambios de comportamiento, pero sospechan que en el futuro se notificarán más casos.
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