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DiversiónTranscripción
00:00:00Mira así. Noto su lengua pasar lentamente sobre mis labios exteriores. Tiemblo. Abducida por el
00:00:10momento y por la excitación que siento, hago lo que me pide. Saco mi lengua y lo hago. Oh, sí,
00:00:18la oigo decir. La sensación me gusta y vuelvo a pasar mi lengua. Ella hace lo mismo y la que
00:00:24jadea ahora soy yo. Hagamos una cosa. Repite lo mismo que yo te haga. Sin más, aquella mujer abre
00:00:34los labios exteriores de mi vagina y posa su ardiente boca en mí. Jadeo, pero hago lo mismo. Abro mi boca
00:00:43y chupo su interior. Durante unos segundos intento hacer lo que ella hace pero no puedo. Yo quiero
00:00:49mover mi lengua de otra manera y mordisquearle los labios internos. Me olvido de mis prejuicios y la
00:00:56mordisqueo. Noto que ella tiembla. Sus labios se abren ante mi contacto y vislumbro el clítoris.
00:01:05Curiosa, llevo mi lengua hasta el hilo roso. Este responde hinchándose en décimas de segundo y yo
00:01:11me inquieto. Oh. Judith, me estás volviendo loca. ¿De verdad que nunca lo habías hecho? Nunca.
00:01:22Avivada por la visión de su clítoris, hago lo que Arrec suele hacerme. Lo toco con la punta de la
00:01:29lengua, lo rodeo y, cuando está hinchado, lo aprisiono entre mis labios y estiro. Marisa se
00:01:35contrae y jadea. Intenta retirarse pero le agarro los muslos y me llevo el clítoris a mi boca para
00:01:42avivarlo más y más. Pensé que aquello me daría asco, pero no. Paseo mi boca por su vagina perfectamente
00:01:50depilada y mordisqueo su clítoris y eso me hace sentir poderosa y exigente. Marisa se restriega
00:01:58contra mí y la oigo gemir. En ese momento yo deseo más, mucho más, pero ella me quiere poseer y me
00:02:04frena. Vuelve a su estado inicial. A cuatro patas sobre mí. Ahora que ya sabes lo que yo quiero de
00:02:13ti, permíteme que disfrute de tu cuerpo. Agarra mis pechos, junta los pezones y se introduce los
00:02:20dos en la boca. Los endurece y con la lengua juega con ellos. Cuando escucha mi jadeo, los deja. Te voy
00:02:28a quitar el camisón. Cierra los ojos y entrégate. Asiento, excitada, pero antes veo que Arrek y Mario
00:02:37entran en el dormitorio. Se sientan cada uno en un lado diferente de la cama y nos observan. Marisa me
00:02:46desnuda, con sus suaves manos baja el camisón que está enrollado en mi cintura y me lo saca por las
00:02:51piernas. Me pone las manos en los tobillos y las sube hasta llegar a mis muslos. A mi liguero. Con
00:03:00mimo, me mordisquea la parte interna de mis muslos y sube, sube hasta que lo que me mordisquea son los
00:03:06pechos. Me gusta lo que veo, susurra Arrek en mi oído. Marisa prosigue su festini, cuando los pezones
00:03:15no pueden estar más duros y estimulados, baja a mi cintura y se entretiene en el ombligo. Me
00:03:22estremezco. Su boca caliente llega hasta mi monte de Venus y se detiene. Recorre con su lengua mi tatuaje
00:03:30y murmura en voz alta y sugerente, Judith, el tatuaje es muy tentador, seguro que levanta pasiones.
00:03:37Miro a Arrek y él sonríe. Yo sé por qué dice eso, pero me callo. No digo ni mu. Marisa levanta la
00:03:47vista un instante y una cascada de emociones se apoderan de mí cuando siento sus manos juguetear
00:03:53entre mis piernas. Estoy empapada. Húmeda. Receptiva. Me toca por encima y, sin esfuerzo, mete un dedo en mi
00:04:03interior mientras con la palma de la mano rosa mi clítoris. Excitada, comienzo a moverme en busca
00:04:10de mi placer sobre su mano. Vamos chicos, oigo qué dice. Participad en mi juego. Mario me toca el pecho
00:04:20derecho y Arrek lleva su boca hasta el izquierdo. Cada uno a su modo y a su manera, me estimulan y me
00:04:26succionan hasta que Marisa me abre las piernas y mete su cabeza entre ellas. Ah, jadeo mientras tres
00:04:33personas me tocan y me chupan. Mi ardiente sexo abierto y expuesto a las exigencias de Marisa
00:04:40responde y yo me arqueo complacida. Me gusta lo que me hacen. Me gusta hacer su juguete. Su experta
00:04:48lengua se mueve dentro y fuera de mí y se detiene en mi clítoris para hacer lo que yo le hice segundos
00:04:53antes. Lo chupa. Lo rodea y tira de él. Me incorporo, extasiada. Calor, calor, mucho calor.
00:05:06Erick abandona mi pecho y busca mi boca, la encuentra y la besa. Su lengua me avasalla,
00:05:11excitada y posesiva, mientras los gemidos que Marisa me arranca salen una y otra vez de mis labios y lo
00:05:18enloquecen. Besos, mimos, palabras susurradas que deseo escuchar. Sí, pequeña, así, entrégate y
00:05:27disfruta para mí. Sólo para ti, repito entre jadeos, durante lo que me parece una eternidad,
00:05:35Marisa juega entre mis piernas mientras Mario me mordisquea los pezones y Erick me besa. Hasta
00:05:41que noto que Mario me agarra un muslo y ya recotro. Me sientan en la cama, me abren para Marisa y me
00:05:48ofrecen a ella. La mujer, enloquecida por haber conseguido lo que lleva tiempo ansiando, me succiona
00:05:54el clítoris con maestría. Yo me retuerzo. Me agarra del culo y me aprieta sobre su boca. Me saborea de
00:06:03mil maneras posibles y yo me dejo hacer mientras disfruto de todo ello. Oleadas de placer intenso y
00:06:10caliente recorren mi cuerpo una y otra vez. Una y otra vez, mojada y lista para mí, oigo que dice.
00:06:18No sé a qué se refiere, pero su marido me suelta, se levanta y desaparece de la habitación. Erick no
00:06:24habla. Sólo me observa tremendamente excitado mientras me sujeta para Marisa. La mujer introduce
00:06:32dos de sus dedos hasta el fondo en mi vagina, los mueve en su interior y los saca. Yo alzo mis
00:06:38caderas en busca de más. Vuelve a meterlos y los saca y soy consciente de que la humedad de sus dedos
00:06:44es mi humedad. Su marido aparece, se sienta en un lateral de la cama y nos enseña un consolador negro
00:06:52de dos cabezas. Estoy deseando ver cómo os folláis la una a la otra. Miro a Arrequiel, aprovecha y me
00:07:00besa, me muerde los labios y murmura palabras cariñosas. Los dedos de Marisa prosiguen su
00:07:07saqueo mientras yo jadeo y disfruto del momento. Instantes después, detiene sus acometidas para
00:07:14llevar su juguetón a boca de nuevo al centro de mi deseo. Me humedece más y más. Yo chillo una y
00:07:22otra vez, una y otra vez, hasta que ella pone el vibrador de dos cabezas entre nosotras y dice,
00:07:28estás muy caliente. Follémonos. Arreq se pone detrás de mí. No me abandona. Está todo el rato
00:07:38pendiente de mí y de mis acciones. Coge el consolador y tras chuparlo lo pone en mi vagina y
00:07:45lo hunde poco a poco, centímetro a centímetro mientras yo siento como aquel objeto estriado me
00:07:50abre la carne y jadeo. Sí, así, susurra Arreq en mi oído. Cuando Arreq se detiene, Marisa abre sus
00:08:00piernas, coge la otra punta del consolador y se ensarta en él. Se muerde los labios y gime mientras
00:08:07lo hunde en su cuerpo y con ello más en el mío. Cuidado, pequeña, murmura Arreq. Me fijo en Marisa
00:08:15y en cómo, con una mirada lujuriosa, se mueve en busca del orgasmo. Mueve sus caderas. El consolador
00:08:24entra en mí y en ella arrancándonos oleadas de placer. Marisa lanza su pelvis contra mí y yo grito,
00:08:31pero no me achico y ahora soy yo la que lanza la pelvis contra ella. Aquel juego nos introduce y nos
00:08:37saca el consolador de nuestras vaginas proporcionándonos un placer maravilloso. Sentadas la una frente a la
00:08:44otra, Marisa me agarra de los brazos y adelanta su vagina. Me mira, aprieta los dientes y jadea.
00:08:53Yo grito enloquecida pero, instantes después, soy yo la que agarra sus brazos y aprieta para que ella
00:08:59chille. Chillidos, jadeos, todo ello, unido a las palabras de Arreq en mi oído, consigue que ambas
00:09:07nos corramos y quedemos sentadas sobre la cama y unidas por el vibrador. Agotadas, nos dejamos caer
00:09:14para atrás. Cierro los ojos. El juego que acabo de tener me ha dejado exhausta hasta que siento que
00:09:21alguien me saca el vibrador, abro los ojos y veo que es Marisa. Sonrío y entonces le oigo decir a Mario
00:09:28mientras se pone un preservativo, vamos, chicas, ahora nos toca a nosotros. Miro hacia Arreq. Veo que
00:09:37rasga un preservativo y se lo pone. Nada más hacerlo, me coge la mano, te voy a atar a la cama
00:09:44y te voy a ofrecer a Mario para que te folle. Ponte boca abajo. Sin rechistar, hago lo que me pide y veo
00:09:53que Marisa hace lo mismo. Mario y Arreq nos atan las muñecas con los pañuelos de seda al cabecero de
00:10:00la cama. Instantes después, la cama se hunde y siento un azote en el trasero. Pica. Reconozco la mano
00:10:08de Arreq cuando me agarra y me hace poner el culo en pompa. Abre las piernas para que él te pueda
00:10:15penetrar bien y yo lo pueda ver. ¿Entendido, cariño? Muevo mi cabeza afirmativamente mientras la excitación
00:10:24por lo que dice me recorre el cuerpo. Instantes después, unas manos desconocidas para mí me cogen
00:10:30de las caderas e introducen su erección poco a poco en mi vagina. Su pene está duro y es ancho,
00:10:37pero no es tan largo como el de Arreq. No llega con profundidad. Yo quiero más. Dejo que me penetre
00:10:45una y otra vez y jadeo de placer en cada embestida mientras escucho los gemidos de Marisa a mi lado y
00:10:51sé que Arreq me mira mientras le da mucho, mucho placer. Imaginar la escena me incita. Me exhorta.
00:11:00Me exalta. Las dos atadas a la cama con el culo en pompa y nuestros hombres follándonos y exigiendo
00:11:07más. Una, dos, tres, cuatro, cinco, seis penetraciones y seis gritos placenteros, a la séptima escucho a
00:11:16Arreq que suelta un ronco gruñido, miro y veo que se corre. Mario me coge en vilo y me levanta,
00:11:24bombea su gordo pene varias veces más dentro y fuera de mí, me aprieta con brusquedad y finalmente
00:11:29ambos nos corremos. Agotada, respiro con la boca sobre las sábanas hasta que siento que Arreq me toca
00:11:36y me desata las manos. Me besa las muñecas y dice, vamos, cariño. Necesitas un baño. Me coge entre sus
00:11:46brazos y yo me acurruco contra él. Me besa la frente. Te quiero. Yo sonbío. Yo también te quiero.
00:11:56Lo vivido minutos antes me tiene exhausta, pero sus palabras hacen que me lata con más fuerza el
00:12:02corazón. Veo el jacuzzi preparado, Arreq me deja sobre él y dice, agáchate y sujétate al borde.
00:12:11Hago todo lo que me pide. Me agacho y el agua me llega hasta la cintura. ¡Qué placer! Oigo que abre
00:12:19la ducha. Se debe de estar duchando. Cuando cierra el grifo, siento que se mete en el jacuzzi y comienza
00:12:27a lavarme. Me enjabona el pelo, me da un masaje en la cabeza y luego, con mimo, me lo aclara.
00:12:35Después me pide que me dé la vuelta. Sus ojos y los míos se miran. Con sus manos, me enjabona el
00:12:42cuerpo y, cuando me aclara, me da un beso en el hombro. Ya está, cariño. El pene de Arreq está duro
00:12:50como una piedra y veo que todo él está empapado. Sale del jacuzzi y me tiende la mano. Se la cojo y
00:12:58salgo yo también. Las piernas me tiemblan y cuando estoy a su lado le hago sentarse sobre la tapa del
00:13:05váter cerrado. Acto seguido me siento ahorcajada sobre él. Cojo su pene y lo hundo centímetro a
00:13:13centímetro en mí. Dios, Jud. Ahora tú, susurro ansiosa. Ahora tú. Cierro los ojos mientras noto que
00:13:23su pene llega hasta mi útero. Echo la cabeza hacia atrás y contraigo mi pelvis. Elik jadea y yo con él.
00:13:32Sus manos húmedas me agarran la cintura y me aprieta contra él. Me gusta. Me enloquece cuando me hace eso,
00:13:40sentir toda su enorme erección llegar a mi útero me altera y vuelvo a contraer la pelvis. Ambos jadeamos.
00:13:49Así, nena, poseeme. Eres mía. Sus órdenes son para mí el arrullo que necesito. Restriego mi sexo
00:13:59contra él y vuelvo a contraerme. Mi vagina lo succiona y cada centímetro que le hago hundirse en
00:14:06mí me hace sentir que me va a partir en dos. Esa sensación es nuestra. La busco. La necesito.
00:14:15Sólo él me da profundidad y quiero más. Me echo hacia atrás y Arrek jadea ante la electricidad que
00:14:21sentimos, yo abro la boca en busca de aire. Cada embestida mía es un jadeo de él. Cada jadeo de él
00:14:29es una embestida mía. El movimiento de mis caderas se vuelve más insistente, más delirante, sus
00:14:36penetraciones más profundas, más seguidas y, cuando siento que me voy a correr, lo miro y susurro,
00:14:43mío. Eres sólo mío. Un grito gutural sale de su garganta y otro de la mía cuando Arrek se empotra
00:14:51totalmente en mí, mientras notamos que nuestros fluidos resbalan por nuestras piernas. Me abrazo
00:14:57a él y el ritmo se detiene mientras me besa el pelo. Durante varios minutos no nos movemos,
00:15:04sólo nos abrazamos hasta que él coge una toalla seca y me la echa por encima. Tiemblo. Con el pelo
00:15:11mojado sobre la cara, Arrek comienza a repartirme un millón de dulces besos mientras me retira el
00:15:17cabello. Sigo sentada sobre él y su erección disminuye en mi interior cuando escucho jadeos
00:15:23e imagino que los otros juegan en la habitación. Arrek. Sí, cariño. ¿Te encuentras bien? Sonríe al
00:15:33notar mi preocupación por él. Perfectamente, mi amor, ¿y tú? Estaciada. ¿Mi castigo ha sido muy duro?
00:15:43Sonrío y lo beso por el cuello. Tus castigos me vuelven loca. Ambos reímos y Arrek me mira a los
00:15:51ojos. Espero que no hayan sido muy duros para ti. Yo más bien diría placenteros. ¿Incluso con Marisa y
00:16:00Mario? Asiento como una niña pequeña. Incluso con ellos. Eric me da un beso en la punta de la nariz y
00:16:10susurra. Me vuelve loco verte disfrutar, cariño. Ofrecerte es un placer para mí. Me provoca un morbo
00:16:17que no puedo remediar y ¿te estás disculpando por ello? Veo que asiente y murmura, Jud. Tengo que
00:16:25hacerlo. Estos juegos no entraban dentro de tu vida. Sé que lo haces por mí y me gustan, lo interrumpo.
00:16:34Me encanta que me ofrezcas mientras tú miras. Eso, aunque no lo creas, me produce el mismo placer
00:16:41que a ti. Y si a ti te enloquece Kevhorn, Marisa o quien decidamos se meta entre mis piernas y juegue
00:16:48conmigo, yo lo acepto. Lo acepto gustosa porque disfruto tanto que un día voy a explotar. ¿Estás segura,
00:16:57cariño? Abro los ojos y lo miro. Acerco mi nariz a la suya y siento la necesidad de preguntar,
00:17:04¿en Alemania seguiremos jugando? Aquello lo pilla de sorpresa. Mi pregunta le afirma lo que él lleva
00:17:12deseando escuchar y me abraza encantado, antes de devorarme la boca. En Alemania te prometo todo
00:17:19lo que quieras. Sesenta a la mañana siguiente, Arrek y yo llegamos a la oficina por separado. Está
00:17:26emocionado por mi próximo traslado a Alemania y yo también. Por suerte tengo algo de ropa en su hotel
00:17:33y me cambio para no ir con lo mismo del día anterior. No le he explicado el episodio vivido
00:17:40con aquellas mujeres y decido callar. En realidad, no pasó nada y, si se lo cuento, se enfadará conmigo.
00:17:48Miguel, como cada mañana, viene a buscarme. Nos vamos a tomar un café antes de comenzar a trabajar.
00:17:56Acepto encantada y me siento frente a la puerta. Sé que Arrek entrará de un momento a otro y me
00:18:03buscará con la mirada. No falla. Diez minutos después, el hombre del que estoy completamente
00:18:10enamorada entra por la puerta y, tras ver donde estoy sentada se sienta enfrente de mí. Miguel y yo
00:18:16seguimos charlando y observo disimuladamente a Arrek desayunar. Su elegancia para untar la
00:18:23mantequilla en el croissant me tiene totalmente ensimismada. En un par de ocasiones, nuestras
00:18:30miradas se cruzan. Sé que está feliz por mi decisión de irme con él a Alemania y tengo que
00:18:35hacer grandes esfuerzos para no reír como una tonta. Cuando acabamos el desayuno, Miguel y yo nos
00:18:42levantamos y Arrek hace lo mismo. Lo veo salir y, cuando llegamos al ascensor, está esperando con
00:18:49las manos metidas en los bolsillos y su gesto serio e inescrutable. Al vernos, nos mira.
00:18:57Buenos días, señorita Flores. Señor Morán. Buenos días, señor Zimmerman, decimos al unísono.
00:19:06Las puertas del ascensor se abren y los tres nos metemos en él. Damos a la planta 17, pero,
00:19:13mientras sube, el ascensor se para en otras plantas y coge a más personas. De pronto, siento que Arrek
00:19:21roza mis nudillos con los suyos y sondío. Cada vez es más difícil estar juntos sin tocarnos. Cuando
00:19:28las puertas se abren en nuestra planta, los tres nos bajamos pero Arrek toma un camino diferente al
00:19:34nuestro. ¿Tú crees que Iseman sonríe alguna vez? Cuchichea Miguel, al ver que se aleja.
00:19:43PSSSS. No sé. A ese tío lo que le hace falta es un buen polvo. Verías cómo sonríe. Eso me hace
00:19:53soltar una carcajada. Si Miguel supiera lo que yo sé, se quedaría de piedra, pero prefiero seguirle el
00:20:00rollo. Estoy totalmente convencida. Entonces aparece mi jefa, nos mira y con su voz chillona dice de malos
00:20:09modos, Judith, sobre tu mesa he dejado varias carpetas. Necesito que fotocopies lo que hay en
00:20:16ella y después lo lleves a mi mesa. Miguel, creo que te buscan en tu departamento. Vamos a trabajar.
00:20:24Prosigo mi camino sola hasta el despacho. Una vez allí, veo las carpetas de mi jefa y me encamino
00:20:32hacia la fotocopiadora. Hago lo que ella me pide y después contesto varios correos de las delegaciones.
00:20:40Sobre las once, entro en el archivo. Necesito varios papeles que me han pedido los delegados.
00:20:46Me encuentro ensimismada con ellos, cuando oigo una voz a mi espalda. MMMMM. Reconozco que encontrarte
00:20:56en el archivo me sugiere mil perversiones. Sondío. Es Arrec, que me observa desde la puerta.
00:21:05Señor Zimmerman, ¿desea algo? Sus ojos pasean por mi cuerpo. ¿Qué tal una vueltecita? Me encanta
00:21:14cómo te quedan esos pantalones. Lo complazco y hago lo que me pide. Doy una vuelta sobre mí misma y,
00:21:22cuando la termino, pregunto, ¿contento? Sí, aunque lo estaría más si te desnudara así, Arrec.
00:21:30Con las manos en los bolsillos, sonríe. Nena, murmura sin acercarse a mí. Pero si me provocas,
00:21:39tendrás morro, río y, cuando veo que se acerca, levanto una mano y murmuro, stop.
00:21:46Eric se para. Fuera de mi archivo. Estoy trabajando y no quiero que me despidan por hacer cosas en el
00:21:54trabajo que no debo, entendido. Arrec da otro paso hacia mí. MMMMM. Estás tan guapa cuando
00:22:04trabajas. Ven aquí y dame un beso. No. Vamos, lo estás deseando tanto como yo.
00:22:13Arrec, alguien nos puede ver. Pone cara de bueno y hace un gesto con la mano. ¿Uno chiquitito?
00:22:21Resoplo, pero me acerco a él y le doy un beso en los labios. Inmediatamente,
00:22:27Arrec me coge de la cintura, me apoya contra los archivadores y me mete su lengua en la boca.
00:22:33Me devora y yo me dejo llevar. Dios, pequeña, ¿qué voy a hacer contigo? De momento, soltarme,
00:22:42me quejo. Me estoy clavando el pomo de la puerta del archivador en el culo. Me suelta rápidamente.
00:22:50¿Te duele? Pregunta, preocupado. ¿Te he hecho daño?
00:22:55No, río. Solo lo he dicho para que me soltaras. De nuevo veo la guasa en sus ojos. Se repasa los
00:23:06labios con la lengua y da un paso hacia atrás. Me mira, levanta un dedo y antes de marcharse dice,
00:23:13que sea la última vez, señorita Flores, que me incita a hacer algo que yo no quiero.
00:23:19Póngase a trabajar y deje de insinuárseme. Veo cómo sale del archivo y sonrío. La felicidad
00:23:27que Arrec me provoca no es comparable a nada en el mundo. Cuando salgo, lo veo hablando por teléfono,
00:23:34cuando cuelga, pasa por mi lado y, aunque no me mira directamente, sé que me ha mirado.
00:23:40Ambos regresamos a nuestros trabajos. A la una me avisan de recepción. Un mensajero trae un ramo
00:23:49de rosas. Cuando el mensajero aparece e indica que el precioso ramo de rosas rojas de tallo largo es
00:23:56para mí, me quedo sin palabras. Cuando se va, saco la tarjetita y leo, como dice nuestra canción,
00:24:03te llevo en mi mente desesperadamente. Me quedo boquiabierta mirando la tarjeta con el ramo en las
00:24:09manos. Leer eso me hace sonreír. Arrec es tan romántico en la intimidad que me encantaría que
00:24:17todo el mundo lo supiera. Mi jefa, que en ese momento pasa por mi lado, se queda mirando el ramo
00:24:23de flores. ¡Qué maravilla! ¿Quién me manda esta preciosidad? Me lo han enviado a mí. Su cara se
00:24:33contrae al escuchar eso, se da la vuelta y se marcha. No le ha hecho gracia saber que yo puedo
00:24:39recibir flores maravillosas. Emocionada, saco uno de los jarrones que guardo para cuando llegan flores,
00:24:46lo lleno de agua y lo pongo sobre mi mesa. Arrec aparece en el despacho, me mira y sin cambiar su
00:24:53habitual gesto serio dice, bonitas flores. Gracias, señor Zimmerman. ¿Algún admirador secreto?
00:25:03Sonrío como una boba. Mi novio, señor. Eric asiente, se da la vuelta y se mete en su despacho.
00:25:12Esa tarde cuando llego a casa, Arrec llega quince minutos más tarde y, con posesión y deleite,
00:25:18me hace el amor. Sesenta y uno el viernes, Arrec me invita a cenar a un restaurante maravilloso.
00:25:26Ponemos fecha a nuestro cambio de residencia y decidimos que será para mediados de enero.
00:25:31Mi pisito es mío, en propiedad. Cuando me mudé a Madrid, mi padre me ayudó a comprarlo y,
00:25:38tras nuestra conversación, decido no venderlo, ni alquilarlo. Será un piso que siempre tendré
00:25:45para cuando quiera regresar a Madrid de visita. Esa noche, a pesar de la felicidad que veo en la
00:25:52mirada de Arrec, intuyo que le duele algo la cabeza. Lo he visto tomarse dos pastillas. Pero
00:25:59no quiere hablar de ello. Se niega. Solo quiere hablar de nosotros y de nuestra próxima vida en
00:26:07Alemania. Tras la cena, cuando nos vamos del restaurante, nos encontramos con unos amigos suyos
00:26:14en la calle. Una pareja. Nos saludamos, y en un momento dado Arrec me pregunta, ¿te apetece que
00:26:22invite a Víctor al hotel para jugar los tres? Mi corazón bombea con fuerza y asiento. Eric sonríe.
00:26:31Voy a hablar con él. Seguro que no dice que no. Arrec y Víctor se alejan un metro de mí y de la
00:26:38chica que va con él. Se llama Loli y es muy simpática. Las dos hablamos, mientras yo observo
00:26:45a los dos hombres. De pronto, veo que a Arrec le suena el móvil, atiende la llamada y deja de sonreír.
00:26:54Tras eso, se acerca a mí y dice, nos vamos. Víctor y Loli se quedan donde estaban y observo
00:27:01que entran en el restaurante. ¿Qué habrá pasado? En el camino de vuelta está más callado de lo
00:27:08normal. Intento hablar con él, bromear, pero no entra en el juego. Finalmente me callo. Cuando
00:27:16Arrec se pone así, mejor dejarlo. Cuando llegamos al hotel, Arrec pide que nos traigan una botella
00:27:23de champán. Yo me quito los zapatos y me siento al borde de la cama. Tengo ganas de jugar. La
00:27:32proposición de Arrec me ha excitado mucho. Arrec se desprende de la chaqueta, la deja perfectamente
00:27:38colocada en el galán de noche y me mira. Suena la puerta y mi corazón aletea. Pero el aleteo se
00:27:46relaja cuando veo entrar al camarero con dos copas y la botella de champán. En cuanto nos quedamos solos,
00:27:52Arrec descorcha la botella, sirve dos copas y cuando me da una murmura en un tono frío y distante,
00:27:59presiento que mi proposición te ha alterado, ¿verdad? Pienso mi respuesta. Podría mentir,
00:28:07pero no quiero. Sí. Eric asiente, da un trago a su copa y pregunta, ¿te gusta mucho que te ofrezca a
00:28:15otros hombres, verdad? Arrec. Responde, Hood. Resoplo y murmuro, sí, me gusta. Se sienta a mi
00:28:25lado y toca con delicadeza mi rodilla. Te aseguro que eso me gusta mucho a mí también y espero
00:28:32ofrecerte a otros. ¿Otros? Sí, otros. Mis juegos son muchos y estoy seguro de que desearás seguir
00:28:41jugando, ¿verdad? Calor, calor y más calor, ya comienza mi calor. Arrec vuelve a llenarme la copa
00:28:49de champán y me saca de mi ensoñación. ¿Te gustaría volver a jugar con una mujer? Sorprendida,
00:28:57me encojo de hombros. No. ¿Seguro? Insiste. Su insistencia me inquieta. Cuando voy a decir algo,
00:29:09él me agarra del brazo y me mira profundamente. ¿Por qué no me dijiste que Marisa y tú os conocíais?
00:29:16Eso me pilla totalmente descolocada. ¿Cómo dices? Quiero saber cuándo sueles ver a Marisa. Yo no suelo
00:29:25verla. Con la mirada velada por la furia, murmura, no me mientas, maldita sea. No te miento. Ella va a mi
00:29:35gimnasio y nos hemos visto allí en un par de ocasiones. Nada más. En ese instante creo que
00:29:42debo explicarle lo que llevo callando tanto tiempo cuando Arrec estalla. Maldita sea, Judith. No soporto
00:29:50la mentira. ¿Por qué no me dijiste que ya os conocíais cuando vino el otro día al hotel? No.
00:29:58No lo sé, yo. Fuera de control, Arrec se aleja de mí. Será mejor que te vayas, Judith. Estoy
00:30:07terriblemente enfadado y no quiero hablar. Pero yo quiero hablar contigo y no quiero dejar las cosas
00:30:14a medias como siempre hacemos cuando te enfadas. Hood. Gruñe. Arrec, tenemos que hablar. De nada sirve
00:30:24que las cosas se queden así. ¿No te das cuenta? Se agarra la cabeza. Ese gesto me hace ver que no
00:30:33está bien. Veo que abre su neceser y se toma otro par de pastillas. Eso me altera. No quiero verlo
00:30:41sufrir. Sale del dormitorio y me quedo sola. Instintivamente, me siento en la cama, me pongo
00:30:49los zapatos y sin decir nada más salgo yo también. Lo veo en la terraza, mirando al horizonte. Me acerco
00:30:57a él. ¿Te duele la cabeza? Sí. ¿De verdad quieres que me vaya? Sí. Arrec, cariño, no sé qué te han
00:31:08explicado pero es una tontería, créeme. Le diré a Tomás que te lleve a tu casa. No. Sí. Él te llevará a tu
00:31:19casa. Adiós, Hood. Hasta mañana. No me mira. No se mueve y, al final, me doy por vencida. Me vuelvo y,
00:31:32con el corazón dolorido, me marcho. 62 suena un ruido. Me sobresalto. Es el teléfono. Salto de la
00:31:42cama. Miro el reloj. Las 5 y 28. Asustada, corro a contestar. Si alguien llama a esas horas, no puede
00:31:54ser por nada bueno. Sí. Cuchufleta, soy yo. ¿Mi hermana? La mato. Yo la mato. Pero, al escucharla
00:32:07llorar, me asusto. ¿Qué ocurre? ¿Qué te pasa? Estoy mal, muy mal. He discutido con Jesús, se ha marchado
00:32:17de casa a las 9 de la noche y mira qué horas son y no ha vuelto. Llora, y llora y llora e intento
00:32:24tranquilizarla. ¿Dónde está Luz? Durmiendo en casa de una amiguita. Por favor, necesito que vengas.
00:32:35De acuerdo, voy para allá. Cuelgo el teléfono y resoplo. Mi hermana y sus histerismos. Menos mal que
00:32:43es sábado y no tengo que ir a trabajar. Pienso en Arrec. ¿Lo llamo? Puede que esté despierto,
00:32:51pero al final decido no molestarlo. Conociéndolo, seguirá enfadado por lo que ocurrió el día
00:32:58anterior. Con rapidez me lavo los dientes, la cara, me pongo unos vaqueros, una camiseta y una
00:33:05chaqueta. Hace fresquito, bajo a la calle y me monto en mi coche. Arranco. Mi hermana no vive
00:33:14lejos, pero a esas horas no me apetece ir caminando. Pongo la radio y tarareo mientras
00:33:21conduzco. Veo un hueco para aparcar frente al portal de mi hermana, paro, meto la marcha atrás y cuando
00:33:27miro por el espejo retrovisor me quedo sin respiración al ver que un coche se abalanza y
00:33:33finalmente choca contra mí. Murmullos, murmullos, oigo murmullos. No puedo abrir los ojos, me pesan.
00:33:43No sé dónde estoy ni qué me pasa. Entonces recuerdo el coche abalanzándose sobre mí y soy
00:33:48consciente de que he tenido un accidente. Sirenas. El ruido de las sirenas me hace abrir de golpe los
00:33:56ojos y me encuentro en una ambulancia con dos hombres mirándome y con gazas con sangre en las manos.
00:34:03¿Se encuentra bien, señorita? Sí, no. No sé. ¿Cómo se llama? Judith. Muy bien, Judith. No se asuste.
00:34:16Unos chicos que iban bebidos le han dado un golpe con su coche. La vamos a llevar al clínico para que
00:34:22se hagan una revisión. ¿Esa sangre es mía? Uno de los jóvenes enfermeros que me atiende siente.
00:34:30No se asuste, pero sí. ¿Pero es sangre? ¿De dónde es? Del labio y de la nariz. No ha saltado el airbag de
00:34:41su coche y se ha golpeado contra el volante, pero no se preocupe, no es nada grave. De pronto,
00:34:48escucho unos chillidos y los identifico rápidamente. Mi hermana. Intento incorporarme para que me vea y
00:34:56sepa que estoy bien, pero no puedo. Me duele horrores el cuello. Por favor, la que chilla es mi hermana.
00:35:05¿Pueden dejar que me vea para que se tranquilice? El muchacho accede y sonríe. Por supuesto. Si quiere,
00:35:14puede acompañarla en la ambulancia. Dos segundos después, veo aparecer a mi hermana con su batita
00:35:20azul de guata. Está pálida. Me ve y sus gritos se convierten en gemidos de terror. ¡Ay, Dios mío! ¡Ay,
00:35:31Dios mío! ¡Cuchu! ¿Qué te ha pasado? ¿Estás bien? Todo por mi culpa, mi culpa. Yo te he pedido que
00:35:41vinieras a casa. ¡Oh, Dios mío! ¡Dios mío! Cuando he escuchado las sirenas y he visto el coche. ¡Oh,
00:35:52Dios! Como te pase algo, yo me muero, me muero. Uno de los jóvenes que nos atienden, al ver su estado
00:36:00de histerismo, se dirige a ella. Si no se tranquiliza, la vamos a tener que atender a usted, señora.
00:36:07Su hermana está bien. Un coche la ha embestido por detrás, pero su estado es bueno, tranquilícese.
00:36:16Raquel, murmuro dolorida. Tranquilízate, ¿vale? Hace un gesto con la cabeza, mientras unos enormes
00:36:25lagrimones le chorrean por la cara. Me coge la mano y la ambulancia arranca. Cuando llegamos a
00:36:32urgencias, la miro y digo, quédate con mi bolso y no llames a papá. No lo asustes, ¿de acuerdo?
00:36:40Como una magdalena, me dice que sí y los enfermeros que llevan la camilla me meten para adentro para
00:36:46atenderme. Me hacen varias radiografías del cuello y del hombro porque les digo que me duele y cientos
00:36:53más de cosas. Estoy cansada, dolorida y me quiero ir a mi casa. Pero allí todo es lento, muy lento.
00:37:02Cuando salgo tres horas después con un collarín en el cuello, un chichón en la frente y los labios
00:37:07hinchados, me sorprendo al ver a mi hermana, a mi cuñado y a Arrek. El primero en llegar a mí es Arrek.
00:37:15Su gesto me hace saber el susto que tiene por lo ocurrido. Me abraza con delicadeza y no dice nada.
00:37:23Su manera de abrazarme y la tensión que noto en su cuerpo hablan por sí solos. El abrazo es
00:37:29interminable, tanto, que finalmente tengo que susurrar, Arrek, estoy bien, cariño, de verdad.
00:37:37Mi hermana nos observa y, cuando Arrek me suelta, la veo llorar de nuevo. Anda,
00:37:42ven aquí y deja de llorar, que no me ha pasado nada. Raquel me abraza y llora desconsoladamente,
00:37:50mientras mi cuñado se acerca. ¿Estás bien? Sonrío lo mejor que puedo.
00:37:57Sí, y por favor, haced el favor de dejar de discutir. En una de estas, me matáis. Lo siento.
00:38:07Ha sido todo culpa mía, se disculpa Jesús. Me suelto de mi hermana y agarro a mi cuñado
00:38:12del brazo. No digas tonterías. Estas cosas pasan porque sí y ya está. Por cierto,
00:38:21no habréis llamado a papá, ¿verdad? Mi hermana niega con la cabeza y yo se lo agradezco.
00:38:29Cuando salimos del hospital, mi hermana y mi cuñado se empeñan en llevarme a su casa.
00:38:34Eric, por su parte, insiste en que me vaya con él al hotel. Al final, me planto. Quiero irme a mi
00:38:43casa, por favor, entendedme. Eric mira a mi hermana. Yo la llevaré a casa y me quedaré con ella. Raquel
00:38:52asiente pero, antes de marcharse, responde, descansa. Después de comer pasaré por tu casa para verte y
00:39:00llamaremos a papá. Cuando mi hermana y su marido se van, veo aparecer el coche de Eric. Tomás, al ver
00:39:08mi estado, se baja rápidamente. ¿Se encuentra bien, señorita? Sí, no te preocupes, Tomás. No es tan malo
00:39:19como parece. En cuanto estoy en el interior del vehículo, cierro los ojos y me recuesto sobre el
00:39:25respaldo. Estoy dolorida y cansada. Eric se acerca a mí, me da un beso en la frente. Abro los ojos.
00:39:35¿Estás mejor de tu dolor de cabeza? Sí, cariño. No te preocupes por eso, ni por nada. Ahora solo me
00:39:45importas tú. Solo tú. Sus palabras y la ternura con que las dice me indican que la discusión está
00:39:53olvidada. Sondío y le acaricio la cara con cariño. ¿Te ha llamado mi hermana? Me coge la mano y la besa.
00:40:02Te mandé un mensaje y ella me llamó, acerca su frente a la mía y murmura, jamás en mi vida lo he
00:40:08pasado peor, cariño. Cuando tu hermana me ha llamado, llorando, y yo oía sus sollozos y solo
00:40:16entendía. Judith, ambulancia, accidente, he creído morir. Exagerado. No, exagerado no. Te quiero y no
00:40:27quiero que te pase absolutamente nada. El rato que he pasado hasta que te he visto ha sido horrible.
00:40:35Desconcertante. No se lo deseo ni a mi peor enemigo. Me siento culpable. Si no te hubiera echado
00:40:43de mi lado, nada de esto hubiera pasado. Arrec, tú no tienes la culpa de nada. No estoy de acuerdo
00:40:51con lo que dices. Me siento fatal. Al ver que resoplo, me da un delicado beso en la comisura de
00:40:58los labios. ¿Te encuentras bien? Sí, e intentando que sonría añado, como verás, de esta, no te libras
00:41:07de mí. Los labios se le curvan pero está demasiado tenso. De ahora en adelante, yo te cuidaré. Por la
00:41:15tarde, tras haber descansado toda la mañana, mi hermana y mi cuñado llegan a mi casa con mi sobrina
00:41:22y mogollón de comida. Mi hermana la mete en el frigorífico mientras observo que le da instrucciones
00:41:28a Arrec que solo dice que sí, aunque sé que no se está enterando de nada. Tras llamar a mi padre y
00:41:35explicarle lo ocurrido, me relajo. Él, a pesar del susto inicial, tras hablar conmigo, con mi hermana
00:41:42y con Arrec sé que se ha quedado más tranquilo. Mi hermana y Jesús están en la cocina hablando.
00:41:50Tienen que hablar. Arrec está viendo un partido de baloncesto en la televisión, cosa que me sorprende,
00:41:57ya que no sabía que le gustara el baloncesto. Mi sobrina Luz, que está sentada entre los dos,
00:42:03pregunta, ¿eres el novio de mi tita? Al escuchar aquello Arrec la mira. Sí. ¿Y te vas a casar con
00:42:12ella? Pues no lo hemos hablado, responde sorprendido. ¿Y por qué no lo habéis hablado? ¿Por qué no?
00:42:21¿Y por qué no? Algún día. ¿No te quieres casar con ella? Arrec clava su mirada en ella. Vale,
00:42:30Luz, lo hablaré con ella. ¿Cuándo? No lo sé. Quizá cuando se recupere, ¿te parece? Genial. ¿Tú quieres ser
00:42:42mitito? Sí. ¿Y por qué? Arrec comienza a desesperarse. Mi sobrina puede llegar a ser exasperante,
00:42:53así que decido acudir en su auxilio. Luz, ¿quieres irte a mi habitación a ver dibujos? A la pequeña le
00:43:01cambia la cara, sonríe y sale escopeteada hacia allí. Arrec me mira a los ojos y sonríe. Gracias,
00:43:09cariño. De nada. Curiosa, pregunto, ¿FLYN no es así? No. Es totalmente diferente. Ya lo verás.
00:43:24Aquella noche, cuando Arrec y yo nos quedamos solos en mi casa, se ocupa totalmente de mí. En
00:43:30un cuaderno se apunta la medicación que tengo que tomar y los horarios, y me sorprendo al ver
00:43:35lo apañado que puede llegar a ser para atender a un enfermo. Eso me hace recordar que está acostumbrado
00:43:42a cuidarse desde hace tiempo. No hace referencia a nuestra discusión y se lo agradezco. Cuando
00:43:49nos acostamos, me da un beso en los labios. Descansa, cariño. Yo me ocuparé absolutamente de todo. El
00:43:58lunes, cuando Arrec se va a trabajar, viene mi hermana para tomarle el relevo. A las 11,
00:44:05me llega un mensaje al móvil. Es Miguel que dice, acabo de enterarme de que eres la novia de Arrec
00:44:12Zimmerman. Zorrona, qué callado te lo tenías. Ya me contarás. Un besito y recupérate. Cuando dejo
00:44:22el móvil sobre la mesa no sé si reír o llorar. Oficialmente ya soy su novia. 63 la baja dura tres
00:44:31semanas y la aprovecho para hacer una última limpieza en casa y comenzar a guardar en cajas
00:44:36las cosas que me quiero llevar a Alemania. Arrec quiere comprarme un coche más seguro y resistente
00:44:42pero yo me niego. Mi Seat Leon me encanta, mi seguro lo arregla en un tiempo récord, y supongo
00:44:49que ha sido Arrec quien les ha metido caña. Queda como nuevo. Arrec me cuida con mimo y me ayuda con
00:44:57las cajas. No me voy a llevar muchas cosas, excepto ropa, fotos, libros y mi música. El resto quiero
00:45:06que se quede todo aquí y, a medida que pase el tiempo, me lo iré llevando poco a poco. El día que
00:45:13aparezco en la oficina todos me miran. Me observan con curiosidad. Saben que soy la novia del jefazo y
00:45:21hacen eso que tanto odio, cuchichear. Miguel se acerca a mí nada más verme. Ahora que eres la novia
00:45:29del jefe, ¿desayunas conmigo? Pregunta con guasa. Lo miro divertida. Anda, petardo, vamos. En el camino
00:45:39se preocupa por mi estado de salud. Le explico mi accidente y él me escucha horrorizado. En la
00:45:47cafetería, cuando voy a pagar, los empleados no me dejan. Tienen orden del señor Zimmerman de no cobrar
00:45:55nada de lo que yo consuma. Todo se pone a su cuenta. Cuando regreso a mi puesto de trabajo, mi jefa sale
00:46:03a saludarme. Su tono de voz ahora es suave e incluso intenta ser agradable conmigo. Menuda
00:46:10perraca es esta. Ahora que sabe que soy la novia de Arrec me lleva entre algodones. A los diez minutos
00:46:17de llegar, veo que entra una chica al despacho y se sienta a la mesa que era de Miguel. Me mira y
00:46:24pregunta, ¿Eres Judith? Asiento y añade, soy Claudia, la nueva secretaria del señor Zimmerman mientras
00:46:32esté en España. Sorprendida, la miro. Eric no me ha comentado nada en el tiempo que he estado
00:46:40de baja, pero no me extraña, Arrec no ha querido hablar absolutamente nada del trabajo en mi
00:46:46convalescencia. Incluso quería que el médico me ampliara la baja, pero yo no lo permití. Eso lo hizo
00:46:53enfadar, pero a mí me dio igual. Mi baja se finaliza y yo comienzo a trabajar. Cuando Arrec entra por la
00:47:02puerta, me mira. Yo también lo miro. Buenos días, señor Zimmerman. Suelta el maletín sobre mi mesa,
00:47:12se acerca a mí y me da un beso en los labios que deja a mi jefa y a la nueva secretaria tiesas.
00:47:18Tras aquel más que deseado beso, murmura, buenos días, Hood. ¿Te encuentras bien? Aturdida por aquel
00:47:26recibimiento, no sé a dónde mirar mientras veo que Arrec retiene sus ganas de reír. Finalmente
00:47:33sonrío. Buenos días, Arrec. Me encuentro bien y dispuesta para trabajar. Mi jefa, encantada de
00:47:42haberse conocido, dice, pero qué bonita parejita hacéis los dos. Falsa. La conozco y veo la falsedad
00:47:50en sus ojos y en cómo me mira. Gracias, responde Arrec. Mi jefa me repasa de arriba abajo. Sigue sin
00:48:00creer lo que ve. Oh, qué anillo más bonito llevas. Es lo que imagino. Arrec coge mi mano, me besa los
00:48:09nudillos y añade con posesión, un diamante para mi precioso diamante. Sus palabras me acaloran,
00:48:16sobre todo al ver cómo me miran esas dos. Finalmente, tras un incómodo silencio, mi jefa
00:48:23se vuelve hacia mí. Judith, ella es la nueva secretaria de Arrec. Se llama Claudia Sánchez y
00:48:31es mi hermana pequeña. Ella ocupará tu puesto cuando tú te traslades a Alemania. Me quedo pasmada. ¿Por
00:48:39qué no me lo ha dicho ella al presentarse? Y, especialmente, ¿por qué ya están haciendo
00:48:45planes sin hablar antes conmigo? Una secretaria muy eficiente, por cierto, añade Arrec. Ese halago
00:48:54me molesta, pero disimulo. Gracias, señor Zimmerman, responde la joven, encantada. Para mí es un placer
00:49:02oírlo decir eso. Estoy encantada de que esté satisfecho con mi trabajo. Esa sonrisita de zorra
00:49:10me la conozco. Es igualita a la de su hermana y sé que no va a deparar nada bueno. Con disimulo,
00:49:18observo cómo se humedece los labios para mirar a Arrec y eso me molesta. Claudia es un cerebrito,
00:49:24además de listísima y monísima, dice mi jefa. Por cierto, Claudia, dile a Judith los idiomas que
00:49:32hablas. La joven pestañea y se toca el cabello. Alemán, francés, inglés, ruso y algo de chino.
00:49:42Impresionante, comenta Arrec. Vaya. La tía es un portento, pero como siga humedeciéndose los labios,
00:49:51se los va a tragar de un puñetazo. Durante un rato hablan delante de mis narices, mientras observo
00:49:58cómo esa sonríe. En sus ojos puedo ver que le encanta su jefe y, en cierto modo, la entiendo.
00:50:07¿A quién no le gusta Arrec? Finalmente, él da por finalizada la charla y se mete en su despacho. Pero,
00:50:14cuando suena el teléfono de Claudia y ésta entra en él, me inquieto como nunca lo había hecho.
00:50:20Apenas puedo mirar mi ordenador. Sólo puedo mirar con disimulo hacia el despacho de Arrec.
00:50:28Dos minutos después, Claudia sale. Voy a por un café para mi jefe. Cuando ésta se marcha,
00:50:36me levanto y entro como un miura en el despacho de mi novio. Él me mira y yo, con los celos instalados
00:50:42en mi cara. Pregunto, ¿qué es eso de ofrecerle a otra mi puesto sin contar conmigo? Al ver que no
00:50:50contesta, insisto, ¿cuándo me ibas a decir que tienes nueva secretaria? Arrec suelta el bolígrafo
00:50:57que tiene en las manos. ¿Algún problema, Hood? No, yo no tengo ningún problema, pero por lo que veo
00:51:05tú sí lo has tenido para no explicármelo. Divertido, Arrec frunce los ojos. ¿Estás celosa
00:51:14de Claudia? No. ¿Entonces? Malhumorada, me retiro el flequillo de la cara. Deja de mirarme con esa
00:51:24sonrisita tonta o te juro que te abro la cabeza con el macetero. Arrec suelta una carcajada que retumba
00:51:30en el despacho. Se levanta, da la vuelta a su mesa y cuando llega a mi lado, sin tocarme,
00:51:37cuchichea. Sabes que ese carácter tuyo tan español me enloquece. Al verlo tan cerca de mí, levanto el
00:51:46mentón y cierro los ojos con fuerza. Dios, ¿por qué no me has dicho nada? Se supone que es mi trabajo
00:51:54y ya se lo has dado a otra. Cariño. Ella se ocupará de mis asuntos el tiempo que me queda en España y al
00:52:03mismo tiempo se va enterando de lo que tú haces. Así, cuando no estés, todo funcionará como hasta el
00:52:10momento. Tengo que pensar en el buen funcionamiento de la empresa, sin prestar atención a lo que me ha
00:52:16dicho, respondo enfadada, ¿pero tú has visto cómo te mira? Solo me han hecho falta cinco minutos con
00:52:24ella para saber que le gusta así, pero a mí quien me gusta eres tú, cuchufleta, me corta. Y el resto
00:52:31de las mujeres, incluida Claudia, no son absolutamente nada para mí. Solo tú, métetelo en esa preciosa
00:52:39cabecita, ¿vale? Y si no te había dicho nada es por evitarte quebraderos de cabeza, ¿y sabes por qué?
00:52:48Porque en Alemania quiero que descanses de horarios y vivas como una reina. Quiero que seas feliz haciendo
00:52:55lo que te gusta y te des todos los caprichos del mundo. Pero si quieres trabajar, no te preocupes,
00:53:02te prometo que habrá un puesto de trabajo allí para ti. De pronto me doy cuenta de lo ridícula que
00:53:08debo de parecer y cierro los ojos. Dios, qué vergüenza. ¿Qué estoy haciendo?
00:53:16Arrec sonríe pero, cuando va a responder, la puerta se abre y aparece Claudia con el café. El
00:53:22teléfono suena, ella lo coge y, tras decirle que es una llamada desde Alemania, yo salgo y cada uno
00:53:29continúa con su trabajo. A la una, Arrec sale de la oficina. Tiene una comida y yo decido ir al
00:53:37vips a comer. Cuando regreso, al pasar por una floristería, se me ocurre algo. Sondío y me
00:53:46dejo llevar por mi impulso. Encargo un bonito ramo de rosas para Arrec que me cuesta un pastón y en
00:53:51la tarjeta escribo, yo no sé hablar, ni francés, ni ruso, ni chino. ¿Me renovarás el contrato?
00:53:58Teco. Cuchufleta. Dos horas después, cuando estoy tecleando en mi ordenador oigo que suena el
00:54:07teléfono de mi nueva compañera. Segundos después, ella se levanta y veo entrar a un muchacho con un
00:54:13bonito ramo de rosas. Claudia se sorprende y se las lleva a Arrec. Con disimulo, observo como ésta se
00:54:22las entrega y sale del despacho. Él, sorprendido, las mira. ¿Rosas para él? Pero cuando abre la
00:54:31tarjetita y lo veo sonreír y mirarme, no lo puedo evitar y sonrío. Instantes después, suena mi móvil.
00:54:39Un mensaje de Arrec. Tu contrato está renovado de por vida en mi corazón. Te quiero.
00:54:4564 a primeros de diciembre, la madre de Arrec aparece por Madrid para ver con sus propios ojos
00:54:52qué tal está su hijo. El pequeño FLYN, según me dijo, iba a venir con ella. Pero, al final,
00:55:01una de sus trastadas se lo impidió y lo dejó en Alemania con la tata. Su felicidad al ver tan feliz
00:55:08a Arrec es plena y más cuando habla de nuestro próximo traslado a Alemania. Sonia se emociona.
00:55:15Saber que su hijo regresa a su hogar la llena de alegría y yo lo veo en su mirada. Aquella noche,
00:55:22cuando llego al restaurante y veo a mi padre y a mi hermana con mi cuñado Jesús esperándonos,
00:55:27salto de felicidad. Eric lo ha organizado todo sin decirme nada. Desea que nuestras familias se
00:55:35conozcan y que lo nuestro sea totalmente oficial. Esa sorpresa me gusta y más cuando mi padre me da un
00:55:41beso y me murmura, tú vales mucho, morenita, y él lo sabe. La felicidad que siento al escuchar a mi
00:55:49padre y ver su cara de orgullo es indescriptible. Él quiere lo mejor para mí y sabe que Arrec es mi
00:55:56felicidad. A la cena se suman Andrés y Frida y, cuando creo que ya no va a llegar nadie más,
00:56:02aparece Marta con un amigo. Todos brindan por nosotros, mientras Arrec y yo nos miramos
00:56:08embobados. Apenas puedo creer que todo esto me esté pasando a mí. He encontrado el amor cuando
00:56:16menos lo buscaba y con la persona que menos esperaba. Eric es mi mundo y mi vida y nada,
00:56:22absolutamente nada, puede empañar mi felicidad y mi alegría. Mi maravilloso novio está guapísimo
00:56:28con su traje oscuro y su camisa azul. Es tan elegante vistiendo que a veces temo no estar a
00:56:35su altura. Su mirada me tiene loca. Sé lo que piensa, lo que desea y acercándome al murmuro,
00:56:43estoy deseando llegar al hotel. Te estás volviendo una depravada, cariño, cuchichea,
00:56:50mientras me besa el hombro. Sonbío, mientras todos cenan tranquilamente a nuestro alrededor.
00:56:57Tan depravada como tú. No hago más que pensar en... ¿Sexo? Asiento y él sonríe. ¿Qué te parece si
00:57:08esta noche jugamos? Clava sus impresionantes ojos claros en mí. ¿Quieres que juguemos esta noche?
00:57:15Abro los ojos y sonrío. Sí. Eric se mete un trozo de carne en la boca y, tras masticarla,
00:57:23me pregunta al oído, algún juego en especial. Me rasco la mejilla y me encojo de hombros. Algo que
00:57:32sea para los dos. Eric asiente. De acuerdo. Haré una llamada. Saber eso me altera y, debe de ser tan
00:57:41escandalosa la cara que tengo, que murmura entre risas. Cambia ese gesto, viciosilla. Ambos sonreímos y
00:57:50ya no puedo dejar de pensar en que nos esperará en el hotel. Cuando la cena se acaba, mi hermana y
00:57:57mi cuñado se llevan a mi padre a su casa y Sonia regresa al hotel. Frida y Andrés se marchan a su
00:58:03casa. El pequeño Glenn tiene un poco de fiebre y ella está preocupada. Yo le pido a Eric regresar
00:58:10al hotel pero él, divertido, me anima a ir a tomar una copa con su hermana y su amigo.
00:58:17Acepto a regañadientes. Pero para incitarlo no paro de susurrarle al oído que estoy lista para
00:58:23lo que él quiera y consigo mi propósito. Lo veo en su mirada, pero decide hacerme sufrir un ratito más.
00:58:31Como yo soy la que vive en Madrid y conoce los locales de moda los llevo al Toxie, lejos de donde
00:58:38podría encontrarme con mis amigos. Si vieran a Eric se quedarían de piedra. Vestido con su traje
00:58:45oscuro no tiene nada que ver con los tatuajes y los piercings de mis amigos. Eso me divierte. Y creo
00:58:53que, en cierto modo, eso, unido a su fuerte personalidad es lo que me enamoró de él. En el Toxie,
00:59:01Marta y yo bailamos divertidas. Marta es una alocada como yo y pronto me doy cuenta de que
00:59:08hacemos buena camarilla. Durante un par de horas, los cuatro nos divertimos de lo lindo y, cuando
00:59:14ponen música más íntima y suena blanco y negro, Eric me mira y dice, señorita Flores, sería tan amable
00:59:21de bailar conmigo esta canción. Por supuesto, señor Zimmerman. Cuando llegamos a la pista, Eric me abraza
00:59:30y por primera vez bailo con él. Nunca había hecho aquello y sentirme abrazada a él mientras suena
00:59:35nuestra canción me parece lo más bonito que he hecho en mi vida. No hablamos. Solo nos abrazamos
00:59:43mientras la voz de Malú canta, te regalo mi amor, te regalo mi vida, te regalaré el sol siempre que
00:59:49me lo pidas. No somos perfectos, solo polos opuestos. Mientras sea junto a ti, siempre
00:59:56lo intentaría. ¿Y qué no daría?