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00:00Más de 11.000 armas de fuego decomisadas por la policía peruana fueron destruidas.
00:09Pistolas, revólveres, carabinas, escopetas y armamento de fabricación artesanal fueron
00:15arrojados a un horno gigantesco, del cual salieron convertidas en fierro fundido,
00:20para que no vuelvan a las calles de Perú. La fundición ocurrió en una planta siderúrgica
00:25ciudad portuaria de Pisco, a unos 250 kilómetros al sur de Lima, en un espectáculo pocas veces
00:31visto en el país. El ministro del Interior, Carlos Morán, indicó que la fundición busca
00:37alertar sobre los peligros de la proliferación de armas ilegales y sobre la importancia que
00:41tiene controlarlas. Las autoridades peruanas aseguran que en los últimos siete años se
00:47han destruido poco más de 30.000 armas. Según el Instituto Nacional de Estadística,
00:52en lo que va del año el 26% de la población peruana fue víctima de algún hecho delictivo.
00:57Casi el 10% de esos hechos se cometieron con armas de fuego. En junio, el gobierno
01:04anunció la incorporación de 6.000 nuevos policías con el propósito de combatir la delincuencia.