• hace 2 meses
La exasistente de Kanye West, Lauren Pisciotta, ha demandado a Ye afirmando que la drogó y agredió sexualmente en 2021, durante una grabación junto a Sean 'Diddy' Combs.  
Pisciotta alega que West cometió "agresión sexual" después de que ella bebiera una bebida adulterada que le sirvió un asistente del estudio.  
Todo forma parte de una demanda previa por despido improcedente, en la que Piscotta afirma que, antes de ser despedida, recibió mensajes explícitos, imágenes pornográficas, vídeos y llamadas telefónicas. 
En la demanda se alega que "se sirvieron bebidas a los demás asistentes, tras lo cual se anunció que todo el mundo tenía que beber si quería quedarse". 
"A medida que la demandante empezó a entrar en un estado alterado y muy alterado, sintió menos control sobre su cuerpo y su habla, y ahí es donde se le escapan a la demandante los recuerdos de esa noche", rezaba la denuncia de Pisciotta.  
Combs, que actualmente está a la espera de juicio por sus cargos de tráfico sexual y chantaje, no está acusado todavía de ninguna falta en esta demanda.  
La demanda afirma que Pisciotta fue contratada por West como asistente, jefa de personal y A&R, de 2021 a 2022.  
Pisciotta no estaba empleada por West en el momento del supuesto incidente, pero afirma que más tarde West mencionó que se habían "enrollado" esa noche, algo de lo que ella no tiene recuerdo alguno.  
Según la denuncia, después de que ella dijera a West que no recordaba la sesión de estudio, West respondió "a las mujeres les encanta decir que no se acuerdan".  
La denuncia también alega que en julio de 2021 en el Hotel St. Regis de San Francisco, West forzó su entrada en la habitación del hotel para usar su ducha porque la suya no funcionaba.  
Pisciotta alega que West "dejó caer su toalla", antes de "intentar empujar por la fuerza su cuerpo desnudo y su pene en la cara de la demandante" e "ignoró sus súplicas para que se detuviera".  
"[Pisciotta] no podía digerir el hecho de que trabajaba para el hombre que la había agredido sexualmente contra su voluntad mientras estaba drogada, que luego la atrajo con éxito de nuevo a su órbita mediante una oportunidad de trabajo para agredirla sexualmente de nuevo", decía la demanda.  
West también se enfrenta actualmente a una demanda de otra exempleada, con acusaciones de angustia emocional, represalias y violación del código laboral.
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