-En los últimos días ha habido un gran escándalo respecto a las fotos, tomadas en febrero pasado, en las que aparece el autoproclamado presidente encargado Juan Guaidó con cabecillas del grupo narcoparamilitar los Rastrojos. Wilfredo Cañizares, de la ONG Progresar, dice que no es posible que él haya ingresado a Colombia por esa zona sin el respaldo paramilitar. ¿Ustedes que conocen la dinámica de la frontera, ratifican esa opinión de Cañizares?
Hay que decir que el paramilitarismo colombiano es muy particular. No son como los paramilitares que surgieron en la dictadura argentina ni se parecen a lo que se vivió en Guatemala o a lo que pasó en Perú con las Rondas Campesinas. A esos paramilitares les pagaba el Estado para que hicieran su trabajo. El paramilitarismo colombiano produce finanzas para sostener la política de Estado, en este caso contra Venezuela. Los Rastrojos, por ejemplo, buscan aliados y generan políticas locales y recursos económicos que se comparten. No es posible que se haya usado esa vía de Puerto Santander sin la anuencia de los rastrojos y, además, sin que hayan tenido encuentros previos. Sin duda alguna hay una conexión entre quienes operan la política de oposición (en la frontera, desde Caracas y desde Bogotá) con las organizaciones paramilitares. Voluntad Popular se asume con los Rastrojos, un sector de Primero Justicia se asume con los Urabeños. Para comprobarlo, basta ver quiénes son los dirigentes de Centro Democrático en Cúcuta y quiénes son los de la oposición venezolana que tienen una relación con ellos. Si se analiza cada una de las trochas que hay a lo largo de la frontera, se sabe cuál de esos grupos está a cargo. Allí cada movimiento se registra, se contabiliza porque lógicamente hay que darle su comisión al general que está a cargo, a la policía y al CTI de la Fiscalía, que tiene su propio cartel. Todo obedece a una política de Estado. Si el Estado colombiano ha direccionado una política contra Venezuela, los grupos como los Rastrojos hacen parte de esa política. Son un componente táctico de la estrategia que es tomar el control de Venezuela.
Hay que decir que el paramilitarismo colombiano es muy particular. No son como los paramilitares que surgieron en la dictadura argentina ni se parecen a lo que se vivió en Guatemala o a lo que pasó en Perú con las Rondas Campesinas. A esos paramilitares les pagaba el Estado para que hicieran su trabajo. El paramilitarismo colombiano produce finanzas para sostener la política de Estado, en este caso contra Venezuela. Los Rastrojos, por ejemplo, buscan aliados y generan políticas locales y recursos económicos que se comparten. No es posible que se haya usado esa vía de Puerto Santander sin la anuencia de los rastrojos y, además, sin que hayan tenido encuentros previos. Sin duda alguna hay una conexión entre quienes operan la política de oposición (en la frontera, desde Caracas y desde Bogotá) con las organizaciones paramilitares. Voluntad Popular se asume con los Rastrojos, un sector de Primero Justicia se asume con los Urabeños. Para comprobarlo, basta ver quiénes son los dirigentes de Centro Democrático en Cúcuta y quiénes son los de la oposición venezolana que tienen una relación con ellos. Si se analiza cada una de las trochas que hay a lo largo de la frontera, se sabe cuál de esos grupos está a cargo. Allí cada movimiento se registra, se contabiliza porque lógicamente hay que darle su comisión al general que está a cargo, a la policía y al CTI de la Fiscalía, que tiene su propio cartel. Todo obedece a una política de Estado. Si el Estado colombiano ha direccionado una política contra Venezuela, los grupos como los Rastrojos hacen parte de esa política. Son un componente táctico de la estrategia que es tomar el control de Venezuela.
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00:00Ahora, los rastrojos no tienen el parecido con el proceso paramilitar que se generó
00:12en la dictadura argentina. Los rastrojos no tienen parecido, ni la estructura paramilitar
00:18colombiana no tienen parecido a lo que se vivió en Guatemala o lo que se vivió en
00:23Perú con las rondas campesinas. Los rastrojos tienen un ingrediente que los separa de los
00:29procesos del paramilitarismo en otras latitudes por cuanto en aquella oportunidad les pagan
00:35el paramilitarismo, ejemplo dictadura, ejemplo Guatemala, el tema Perú. El paramilitarismo
00:42colombiano produce finanzas para sostener la política de Estado. El Estado colombiano
00:47ha definido una acción contra Venezuela y los rastrojos lo que hacen es buscar sus aliados,
00:54generar políticas locales y en ese generamiento de políticas locales están los recursos
00:59de orden económico que además se comparten. No va a ser posible el tránsito por esa vía
01:06llegando a Puerto Santander sin que se tenga la anuencia de los rastrojos, pero además
01:10sin que hayan tenido encuentros previos. Sin duda alguna hay una conexión entre quienes
01:16operan la política de oposición en Venezuela en la frontera, quienes la lideran desde Caracas
01:22y quienes están actuando en Bogotá. Así como Voluntad Popular se asume con los rastrojos,
01:27un sector de Primero Justicia se asume con los burabeños en Cúcuta, porque usted debe
01:33identificar quién es centro democrático en Cúcuta y quiénes de los actores venezolanos
01:39de oposición tienen la relación con ellos. Entonces usted empieza a deslindar entre la
01:43vida y la muerte los rastrojos hacia Puerto Santander, entre la vida y la muerte los burabeños
01:49hacia Cúcuta, entre la vida y la muerte van a encontrar los pelusos y la combinación
01:55del Clan del Golfo en la zona del Catatumbo. Y así puede ir viendo cada una de las trochas
02:00que hay entre Colombia y Venezuela. No se puede actuar en la frontera saliendo desde
02:06Venezuela si los rastrojos no tienen conocimiento de ello. Se planilla cada paso, además se
02:12contabiliza cada ingreso de los rastrojos, porque eso hay que cuantificarlo y lógicamente
02:17hay que darle al general que está a cargo y hay que darle a la policía y hay que llevarle
02:20al CTI y a la fiscalía que han surgido denuncias sobre ese particular, porque hay un cartel
02:26que se asume desde la fiscalía colombiana. Y todo eso tiene que ver con una política
02:30de Estado y si el Estado ha direccionado acciones contra Venezuela, sin duda alguna los rastrojos
02:35hacen parte de esa política de la oposición venezolana que confluye en un ejercicio de
02:41un componente táctico para la estrategia de ellos que es tomarse Venezuela.