Un misterio sin resolver.
El 15 de junio de 1952, el arqueólogo mexicano Alberto Ruíz de Lhuillier y su equipo realizaron un magno descubrimiento en el Templo de las Inscripciones de Palenque, Chiapas: encontraron la tumba del gobernante maya, K’inich Jannab’ Pakal, mejor conocido como Pakal “El Grande”.
El descubrimiento de la tumba se realizó bajo una escalera de 45 escalones, ésta contaba con una lápida utilizada como tapa del sarcófago con los restos de Pakal y la ofrenda que se le otorgó por gobernar.
Hasta el momento es considerado el monumento funerario más importante de Mesoamérica y de la cultura maya.
Pakal, era un dios maya y rey de la ciudad de Palenque desde el 26 de julio del año 615 hasta su muerte. Nació el 23 de marzo del año 603 y murió el 28 de agosto del año 683.
Pero los restos aparecidos en el sarcófago real corresponden anatómicamente a una persona de unos 40 o 50 años de edad, que además tiene una talla muy por encima de la media que alcanzan los mayas.
Los antropólogos también han resaltado que los restos del difunto Pakal corresponden a un varón robusto y bien proporcionado.
Desde luego, nada que ver con un anciano maya octogenario.
El 15 de junio de 1952, el arqueólogo mexicano Alberto Ruíz de Lhuillier y su equipo realizaron un magno descubrimiento en el Templo de las Inscripciones de Palenque, Chiapas: encontraron la tumba del gobernante maya, K’inich Jannab’ Pakal, mejor conocido como Pakal “El Grande”.
El descubrimiento de la tumba se realizó bajo una escalera de 45 escalones, ésta contaba con una lápida utilizada como tapa del sarcófago con los restos de Pakal y la ofrenda que se le otorgó por gobernar.
Hasta el momento es considerado el monumento funerario más importante de Mesoamérica y de la cultura maya.
Pakal, era un dios maya y rey de la ciudad de Palenque desde el 26 de julio del año 615 hasta su muerte. Nació el 23 de marzo del año 603 y murió el 28 de agosto del año 683.
Pero los restos aparecidos en el sarcófago real corresponden anatómicamente a una persona de unos 40 o 50 años de edad, que además tiene una talla muy por encima de la media que alcanzan los mayas.
Los antropólogos también han resaltado que los restos del difunto Pakal corresponden a un varón robusto y bien proporcionado.
Desde luego, nada que ver con un anciano maya octogenario.
Category
🗞
Noticias